domingo, 31 de enero de 2010

LA SIRENITA FELÍZ

El artículo que postearé tiene un par de semanas, pero como no lo había subido y conseguí la foto tal cual, que es hermosa y demasiado tierna ahí va. En estos días Claudia disfrutará de una semana entera con su pequeña y su marido, sin funciones hasta el sábado que será día de doble función, porque Fort se llevó a parte del elenco a Miami, viaje que Claudia no pudo hacer porque no se separa de su pequeña princesita.













CLAUDIA FERNÁNDEZ LLEVO A SU HIJA AL AQUARIUM

Mientras espera que se defina el estreno de Fortuna, la obra de Ricardo Fort en la que actuará, la vedette uruguaya se dedica a pasear con la pequeña Mía, de apenas tres meses. Como todavía no la puede llevar a la playa, para cuidarla del sol se queda en su casa o, como hace unos días, la lleva a ver los delfines.Hace tres meses la vida de Claudia Fernández dio un vuelco total: se convirtió en madre.

Mía Elena pasó a ser su prioridad, y hoy su labor más placentera es divertirla y consentirla en todo lugar y momento.Hace algunas semanas que la vedette, su marido, Leonel Delménico, y la beba están instalados en La Felíz, esperando a que se confirme la fecha del estreno de Fortuna, la obra de Ricardo Fort en la que actuará Claudia.

Pero mientras los productores se ponen de acuerdo, los Delménico se entretienen y salen a caminar, a comprar ropa para Mía o disfrutan de días de tranquilidad en la casa que alquilaron en la Reserva Forestal El Alfar. La playa es lugar restringido para la familia, ya que la beba, de sólo tres meses, no puede estar mucho tiempo expuesta al sol.

Por eso, el lunes 4 a la Fernández se le prendió la lamparita y decidió llevar a su hija al Aquarium. Allí tuvieron la posibilidad de tomar contacto con los delfines, especialmente con uno recién nacido:

“Se juntaron las dos bebés, y aunque Mía es muy chiquita para recordar esto, es muy despierta y disfrutó mucho todo el día”, comentó la uruguaya.La familia pasó una tarde espectacular en la que recorrieron todas las atracciones del lugar y partieron una vez caído el sol. La beba estaba agotada pero según su madre “se portó de maravillas. Es más: es así siempre. Una vez que le doy la teta, duerme toda la noche. Es un sol y me la quiero comer a besos todo el tiempo”.

Paula Galloni
Fotos: RS Fotos
Revista Pronto – 13.01.2010

CLAUDIA Y SU PRECIOSA PRINCESITA.

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