

“ME PASÉ LA LUNA DE MIEL COMIENDO MARISCOS”
Después de casarse con toda la pompa, la uruguaya y su flamante marido se fueron a Buzios. Tardes de sol y playa, paseos por toda la península, siestas muy cariñosas y comidas típicas, sobre todo eso, le pusieron sal y pimienta a un viaje que aplaudió el triunfo del amor.
El agua, intensamente cristalina; la espuma, blanca y radiante como una novia; la arena, dorada como el sol infatigable, y el clima, cálido, ideal, hasta cariñoso, fueron testigos de un amor grande como el majestuoso océano Atlántico y bello como el paisaje de Buzios. Recién casada, Claudia Fernández se hizo una escapada con Leonel Delménico, su flamante marido, a ese paraíso enclavado en Brasil para disfrutar de su primera luna de miel, Con su hermosa pancita, de casi cuatro meses, la uruguaya y su esposo celebraron la unión, y algo más.
“Decidimos conocer la península porque teníamos pocos días para tomarnos, y era un lugar que nos quedaba bastante cerca. Los cuatro días que pasamos allá nos sirvieron para descanar y desenchufarnos. Hasta me fui sin celular porque mi handy quedó en el bolsillo del traje de Laurencio Adot, la noche de la boda, y eso me jugó a favor”, contó la protagonista de Confesiones de mujeres de 30. Instalados en la suite presidencial del Brava Hotel (un alojamiento cinco estrellas), los esposos amanecían tarde, desayunaban con frutas y se preparaban para las tarde de plataza, entre las que frecuentaron Geribá, Cabo Frío y Brava.
“Pasamos los días al sol y disfrutamos del mar a pleno”. Cuando regresaban al su habitación, Claudia y Leonel se hacían un hueco para una “siestita cariñosa, muy cariñosa”, hasta que se preparaban para sacarle provecho a la noche brasileña.
LA MIEL DE MI VIDA. Para sumarle diversión y adrenalina al viajecito, los futuros padres alquilaron un buggy y recorrieron toda la península hasta su final, en Rua Das Pedras – la avenida más importante y conocida del lugar – y cenaron en distintos restaurantes.
“Todo lo que probé tenía mariscos, que me encantan. Hasta a las pastas les pedía que las acompañaran con salsa de camarones. Mi debilidad son las comidas, y me gusta que sean ricas y portentosas. Lo dulce nunca me tiró demasiado. Leonel reprendió con las otras y todo los días repetía el palto. Otra cosa que me encantó fueron los jugos de ananá, me tomé un montón. Las frutas allá son moneda corriente, y preparan jugos riquísimos”.
Además de la comida y el descanso, a muchísimos kilómetros de distancia, el viaje los sorprendió. Fernández y Delménico se encontraron con Violeta Rivas y Néstor Fabián, un matrimonio que ya lleva 42 años de duración.
“Fue muy gracioso, estaban al tanto de que nos habíamos casado hacía muy poquito y nos felicitaron. Se mostraron muy afectuosos con nosotros”, detalló.
Y como todas las escapaditas deben concluir sí o sí con un regalito, marido y mujer salieron de compras. ¿En qué gastaron, qué eligieron uno u otro? Nada personal… En el free shop de Río de Janeiro compraron un montón de ropa, entre remeritas, bodies, camperitas y zapatillas para el bebé que está por venir.
“Eso sí, todo unisex porque todavía no sabemos el sexo”, recordó la conductora, entre risas.
Fuente: Revista Paparazzi
hermosas las fotos y muy buena
ResponderEliminarla informaciòn,ya se le nota la pancita
a clau esta preciosa .
que tengas un hermoso fin de semana y como siempre muy lindo el blog..un beso amigo te kiero mucho un beso cuidate