lunes, 9 de noviembre de 2009

CLAUDIA FERNÁNDEZ PRESENTA: “ELLA ES MÍA, LA LUZ DE MI VIDA”

LA URUGUAYA ORGULLOSA MOSTRÓ A SU HIJA Y CONTÓ A PUROSHOW CÓMO SERÁ SU CUARTO EN SU CASA DE ESCOBAR
CLAUDIA FERNÁNDEZ PRESENTA: “ELLA ES MÍA, LA LUZ DE MI VIDA”




















Primicia de PUROSHOW.
A las hs.16:00, Claudia Fernández y Leonel Delménico dejaron la suite presidencial de la clínica Suizo Argentina con la pequeña Mía en sus brazos. A tres días de haber dado a luz, la flamante mamá se enorgulleció al presentar a la beba.
“No voy a salir del sanatorio con ella envuelta para que nadie le vea la cara."

“No voy a ocultarla ni a salir del sanatorio con ella envuelta para que nadie le vea la cara. Ella es Mía, hija y quiero compartir con todos esta felicidad”, dijo la uruguaya.
Sin perder la sensualidad, Claudia y su marido, emprendieron rumbo hacia su casa de un barrio privado de la localidad de Escobar. Recordemos que fue primicia de PUROSHOW el acondicionamiento del espacio de Mía.
“Hicimos una casa inteligente, racionalista, con mucho confort para recibirla. El cuarto de Mía es mi preferido, lo hice yo misma con estilo clásico y toques modernos y románticos. Por ejemplo, compré en el mercado de las pulgas un cheslong antiguo tapizado con cuero blanco y lo llené de almohadones forrados de varias telas: con lunares, rayas y flores en tonos blanco y lila", comentó.
"El abuelo paterno le hizo un perchero de hierro forjado y yo unos cuadritos en relieve con vestidos de muñecas y además, forré con telas una por una las perchas para su ropita más importante. Me entusiasma mucho la idea de que mi hija tenga cosas hechas a mano por la gente que la ama", aseguró Claudia.
"Las paredes son blancas y tienen impresas las estrofas de las canción que inventé para ella. La letra dice: canción de cuna escrita para vos. Lleva tu nombre, es mía como una flor. Dentro de mi vientre creciste con mucho amor. Hay una estrella que cuida tus sueños hoy. Duerme, que siempre a tu lado duermo yo.” Además, la abuela paterna le regaló una valija antigua, redonda en la que guardé todos sus zapatos, entre los que están los 19 pares de zapatillas que le regaló su papá”, finalizó Fernández.

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